El pasaporte, José Hierro

¿Cuándo? Publicado en , en el Libro de las alucinaciones.

«Tienes estrellas en la frente»,1
me hubieran dicho hace unos años gentes desconocidas,2
rostros que no he de conocer jamás.3
No sé por qué se me ha ocurrido4
esto de las estrellas, ni qué quiere decir.5
(Habré de recordarlo mañana, cuando sea de día). Y otra idea6
que viene y va: es un símbolo,7
más bien un argumento para un cuento vulgar.8
Tiene que ver con un caballo de cartón y un niño.9
(Cuando despierte de la fiebre, al terminar el viaje,10
veré que es tema propio para un cuento11
con fondo de sonajas, panderos y rabeles.12
Un argumento que ya ha sido escrito13
cientos de veces, enternecedor, vulgar,14
folletinesco). Un niño que soñaba15
con un caballo que no tuvo.16
Y cuando se hizo hombre lo compró17
para vengarse de los años.18
Ya imagináis lo que sucede19
cuando intenta desenterrar20
el niño antiguo. Veinte, treinta años21
tan gran retraso mata demasiadas cosas22
Esta es la idea que me ronda: un cuento repetido23
hasta la saciedad, efectista, ridículo,24
un cuento lacrimoso propio de Navidad.25

No sé por qué se me ha ocurrido26
este estúpido ejemplo. (¿Y qué era aquello otro27
de las estrellas en la frente?,28
No me explico que pueda enternecerme29
algo que en otras circunstancias30
me hubiera hecho reír. Cuando sea de día31
me excusaré conmigo mismo32
-estaba solo en el departamento,33
tiritaba de fiebre, era de noche,34
el tren cruzaba lugares desconocidos...35
Me excusaré también por no haberme asomado36
a acariciar verdores, cielos pálidos, ciudades, ríos.37
(Diré que era de noche, que nada se veía fuera.38
Y mentiré. Porque este viaje pude hacerlo39
hoy, de día, sin fiebre, y hubiera sido igual.40
O ayer, de noche, enfermo. Y, sin embargo,41
hubiera adivinado lo escondido en lo oscuro).42

Debí aclarar que eso de las estrellas,43
lo del caballo de cartón, la fiebre44
el paisaje invisible detrás de los cristales,45
ocurría viajando hacia París.46
Aclararé. Por vez primera salía de mi patria47
con veinte años de retraso48
sobre mis esperanzas. Miré mi pasaporte. En mi fotografía49
una aureola de ceniza velaba el cráneo calvo.50
(«Tienes estrellas en la frente, muchacho»,51
me hubieran dicho entonces).52
El pasaporte era en mi mano53
una orden de libertad54
que llegó veinte años tarde.55
Entonces, en su día, en mi día,56
hubiera yo besado las piedras de París,57
cantado bajo un cielo irrepetible,58
quemado el aire con mi vida...59

...Quemado el aire. Ya no es hora. Gracias60
de todos modos. Has llegado tarde.61
Sé bienvenido con mi fotografía,62
datos y cifras personales,63
mi profesión, mi edad, mis tantas cosas olvidadas o desterradas.64
Ahora ya da lo mismo Londres, París, Madrid.65
Igual música llevan el Támesis, el Sena, el Manzanares.66
Esta serenidad (o indiferencia: como queráis llamarlo)67
dan los días. Incluso puedo mezclar en un poema,68
sin temor al ridículo,69
estos nombres de ríos navegables y abiertos -Sena, Támesis-,70
con los de cauces casi secos -Manzanares:71
San Sebastián de flechas gongorinas, lopescas, quevedescas.72
Porque no es hora ya de engrandecer,73
de idealizar, de mentir bellamente,74
sino que es hora de reconocer75
y de aceptar, sin canto y sin pasión,76
como si ante un notario hiciese testamento77
momentos antes de mi muerte.78
Un documento, no un poema.79
Un testimonio, una radiografía80
que no pretende ser hermosa, sino útil.81

Útil, tal vez, para mí solo82
(es decir, objetivamente inútil). ¡Qué tristeza83
este juguete que llega tan tarde!84
Ahora el mundo no es ya nieblas acá,85
playas y piedras radiantes allá,86
ni ríos navegables que abren sus brazos al que llega87
de una patria de ríos violentos y profundos88
como las gentes que los ven pasar.89
Cualquier punto del orbe (perdonad90
la generalización pedantesca)91
es un lugar para soñar, para vivir,92
para estar solo y continuar la espera93
sin demasiada avidez,94
sin emoción y sin sorpresa.95

No es lo peor que esto suceda así,96
sino que pudo suceder de otra manera.97
Y lo pienso, Dios mío, besando el pasaporte,98
unas escasas hojas de papel99
entre las que han quedado tantas cosas100
que ya no tienen realidad.101
Tantas cosas que un día pudieron haber sido.102

103

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