Como una sola flor desesperada, Juana de Ibarbourou

Lo quiero con la sangre, con el hueso,1
con el ojo que mira y el aliento,2
con la frente que inclina el pensamiento,3
con este corazón caliente y preso,4

y con el sueño fatalmente obseso5
de este amor que me copa el sentimiento,6
desde la breve risa hasta el lamento,7
desde la herida bruja hasta su beso.8

Mi vida es de tu vida tributaria,9
ya te parezca tumulto, o solitaria,10
como una sola flor desesperada.11

Depende de él como del leño duro12
la orquídea, o cual la hiedra sobre el muro,13
que solo en él respira levantada.14

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Análisis

Esta poetisa nos ofrece un soneto en el que hay una entrega total hacia el amante, hacia el amor, de una manera sincera, directa y sin ningún tipo de tapujos. Así, en el primer cuarteto, se nos habla de un amor-deseo por alguien al que se desea por quien es, por su vitalidad, por su manera de mirar y enfrentar la vida y con su sexualidad y su pasión. Ella se siente viva y parece que se entrega de manera voluntaria a este amor tan ardiente que la tiene enganchada, presa.

En el segundo cuarteto, la poetisa nos habla de que este amor es una obsesión que le quita el sueño. Lo desea, está enamorada y ama todo lo que hay en él: su sonrisa, su llanto, su manera de quererla y de entregarse mutuamente.

En el primer terceto de este soneto, vuelve a insistir en la entrega total por parte de la poeta, llegando hasta el punto de ofrecerse como ofrenda para morir si él lo desea. Hasta que lo encontró se sentía presa, paralizada como una flor que quiere moverse, ser libre. En el segundo terceto de este soneto, ella siente y es consciente de que es dependiente de ese amor, de ese deseo, y que su vida sin la presencia del amante, de ese hombre, no tendría sentido.

Estamos ante una visión realista, descarnada del deseo amoroso y sexual de una mujer hacia un hombre y de cómo esta lo plasma con palabras en un poema. Parece una liberación que hacía tiempo deseaba realizar pero, por los motivos que fueran, ya sea porque no había encontrado a la persona adecuada, u otros, no fue posible hasta ese momento.

El poema no solamente tiene una carga emocional importante, una sinceridad desbordante, sino también una carga erótica y sexual, incitante, que impregna todas las estrofas y que nos hace llegar esa sensación de una manera muy viva, con mucho deseo, con sinceridad.

Puede parecer algo atrevido pero sí que es importante señalar que el amor, el erotismo, la sensualidad, cuando está enfocada desde el punto de vista femenino y escrito por mujeres, tiende a ofrecer una imagen más atrevida, más despojada de artificios, de descripciones innecesarias e incluso se busca que haya claridad en lo que se quiere expresar para que el mensaje de la poeta se plasme de la manera que quiso expresarlo en el momento que lo escribió.

Nota de Susana Marín.

Marín, Susana. May., 2014. Como una sola flor desesperada, de Juana de Ibarbourou. Poemario. Acceso en https://poemario.com/como-una-sola-flor-desesperada/

Ejemplos de figuras literarias en Como una sola flor desesperada

Figuras Literarias Ejemplos Descripción
Metáfora "Lo quiero con la sangre, con el hueso" Refleja un amor tan fundamental para Ibarbourou, como lo son la sangre y el hueso para el cuerpo humano.
Metáfora "desde la herida bruja hasta su beso." "Herida bruja" es una metáfora que puede representar el dolor emocional causado por el amor. A través de este verso, la autora contrasta el dolor ("herida bruja") y el placer ("su beso") inherente a una experiencia amorosa.
Hipérbole "Mi vida es de tu vida tributaria" Magnifica la importancia de la pareja en la propia vida, hasta el punto de que su existencia parece estar en deuda o ser subsidiaria por el otro.
Hiperbatón "Lo quiero con la sangre, con el hueso" Acentúa los elementos físicos ("sangre", "hueso") que simbolizan la intensidad del amor. La forma estructural-gramatical resalta estos elementos.
Antítesis "desde la breve risa hasta el lamento" Contrasta la "risa" y el "lamento", representando el espectro completo de emociones experimentadas en el amor.
Oxímoron "y con el sueño fatalmente obseso" "Sueño" y "fatalmente obseso" forman un oxímoron, en el sentido de que los sueños suelen asociarse con la esperanza y la positividad, mientras que "fatalmente obseso" indica un tipo de relacionamiento que puede llegar a ser destructivo.
Metonimia "con el ojo que mira y el aliento" En este verso, "el ojo que mira" y "el aliento" se utilizan como metonimia para representar todas las percepciones y la vida misma, respectivamente.


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