Una revolución.1
Luego una guerra.2
En aquellos dos años —que eran3
la quinta parte de toda mi vida—,4
ya había experimentado sensaciones distintas.5
Imaginé más tarde6
lo que es la lucha en calidad de hombre.7
Pero como tal niño,8
la guerra, para mí, era tan sólo:9
suspensión de las clases escolares,10
Isabelita en bragas en el sótano,11
cementerios de coches, pisos12
abandonados, hambre indefinible,13
sangre descubierta14
en la tierra o las losas de la calle,15
un terror que duraba16
lo que el frágil rumor de los cristales17
después de la explosión,18
y el casi incomprensible19
dolor de los adultos,20
sus lágrimas, su miedo,21
su ira sofocada,22
que, por algún resquicio,23
entraban en mi alma24
para desvanecerse luego, pronto,25
ante uno de los muchos26
prodigios cotidianos: el hallazgo27
de una bala aún caliente,28
el incendio29
de un edificio próximo,30
los restos de un saqueo31
—papeles y retratos32
en medio de la calle...33

Todo pasó,34
todo es borroso ahora, todo35
menos eso que apenas percibía36
en aquel tiempo37
y que, años más tarde,38
resurgió en mi interior, ya para siempre:39
este miedo difuso,40
esta ira repentina,41
estas imprevisibles42
y verdaderas ganas de llorar.43

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