La Jaula, Alejandra Pizarnik

¿Cuándo? Publicado en , en el libro Las aventuras perdidas.

Afuera hay sol.1
No es más que un sol2
pero los hombres lo miran3
y después cantan.4

Yo no sé del sol.5
Yo sé la melodía del ángel6
y el sermón caliente7
del último viento.8
Sé gritar hasta el alba9
cuando la muerte se posa desnuda10
en mi sombra.11

Yo lloro debajo de mi nombre.12
Yo agito pañuelos en la noche13
y barcos sedientos de realidad14
bailan conmigo.15
Yo oculto clavos16
para escarnecer a mis sueños enfermos.17

Afuera hay sol.18
Yo me visto de cenizas.19

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Análisis

El sol sólo es una estrella que brilla, pero el hombre la ensalza y le canta. El protagonista del poema parece estar preso y sólo siente el calor del sol un rato cada día, cuando éste se oculta antes del anochecer. El resto del día todo es oscuridad y sombra. Ya no sabe quién es, en qué momento de su vida está. La realidad es algo subjetivo. El protagonista del poema sueña para no sentirse peor. Fuera está el sol, la libertad. Dentro de donde está encerrado, sólo la muerte.

Estamos ante un poema en el que no tenemos claro si el protagonista del mismo es un preso político o un preso común. Sea lo que sea, en lo que se centra la poeta es en la sensación de soledad y muerte en vida que rodea a un preso. Éste no es dueño de su tiempo, no es dueño de su vida y lo único que puedo hacer es ver cómo pasan las horas detrás de unas rejas, detrás de la jaula que indica el título del mismo.

Tal como nos dicen sus versos, para el preso fuera está la libertad y dentro está la muerte. La realidad es algo subjetivo y se transforma porque únicamente puede verla durante unas horas al día. Es por ello que lo único que le queda preso para mantener la cordura es el soñar, es pensar e idealizar lo de fuera o sentir que, en algún momento, podrá salir y tener una vida. Mientras está preso no es dueño de sí mismo ni de sus sueños.

Para el protagonista del poema nada es lo que parece, nada es tangible porque no puede alcanzarlo con la mano, porque no puede tocarlo, porque no puede envolverse en esa realidad que tiene cerca y, a la vez, tan lejos. Lo único cierto es que las horas no se miden por el reloj, sino por las horas de sol que ilumina una parte mínima de lo que puede alcanzar a ver con los ojos, con la mirada. El resto del día, el tiempo se mide en oscuridad, en paredes, en barrotes y en el encierro diario al que está sometido.

Nota de Susana Marín.

Marín, Susana. Nov., 2015. La Jaula, de Alejandra Pizarnik. Poemario. Acceso en https://poemario.com/jaula/

Ejemplos de figuras literarias en La Jaula

Figuras Literarias Ejemplos Descripción
Metáfora "Ciudad de mis días marinos" El autor utiliza la metáfora para vincular la ciudad con sus días en el mar, dando a entender que la ciudad es tan fundamental para su vida como el mar para un marinero.
Metáfora "ciudad voladora entre monte y abismo" La metáfora de la "ciudad voladora" sugiere la belleza, la majestuosidad y la fragilidad de la ciudad, que parece suspendida entre el monte y el abismo, en un equilibrio delicado.
Símil "con calidad de pájaro suspenso" La ciudad se compara con un pájaro suspendido, sugiriendo un sentido de libertad, de levedad y de posibilidad de vuelo, así como la delicadeza y vulnerabilidad de algo que podría caer en cualquier momento.
Antítesis "ciudad prodigiosa, momento que en la mente de un Dios emergiste" La antítesis entre la "ciudad prodigiosa" y el "momento" que emergió en la mente de un Dios destaca la dualidad de la ciudad como algo tangible y real, y a la vez como una idea o un sueño divino.
Hipérbole "Un soplo de eternidad pudo destruirte" La hipérbole en "Un soplo de eternidad pudo destruirte" enfatiza la fragilidad y la transitoriedad de la ciudad, que parece existir en un equilibrio tan delicado que incluso un soplo podría destruirla.
Metonimia "Allí el cielo eras tú, ciudad que en él morabas" La ciudad es utilizada como metonimia del cielo, que representa un estado de ser elevado, celestial o divino. Este uso sugiere que la ciudad es tan sublime o trascendental para el autor como el cielo mismo.
Paralelismo "Pie desnudo en el día. Pie desnudo en la noche." El paralelismo entre el pie desnudo en el día y el pie desnudo en la noche crea una repetición y un ritmo que enfatizan la continuidad de la experiencia del autor en la ciudad, sin importar el tiempo del día.


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