Me quedo en tus pupilas, sin convite a tu fiesta de fantasmas.1
Adentro todos trenzan sus efímeros lazos,2
yo solo afuera, y sin amor, mas prisionero,3
yo, mozo de cordel, con mi lamento, a tu ventana,4
yo, nuevo triste, yo, nuevo romántico.5

Dentro de ti, las nupcias de hielo al sol del árbol y la nube,6
pareadas risas que se pierden por perdidos senderos,7
la inevitable luna casi líquida,8
el agua rota en trinos y en su música un lirio y una abeja en su estigma9
y en su aguijón tu anhelo de olvidarme.10

Yo, en alta mar de cielo11
estrenando mi cárcel de jamases y siempres.12

Dentro de ti, la casa, sus palmeras, su playa,13
el mal agüero de los pavos reales,14
jaibas bibliopiratas que amueblan sus guaridas con mis versos,15
y al fondo el amarillo amargo mar de Mazatlán16
por el que soplan ráfagas de nombres.17
Mas si gritan el mío responden muchos rostros que yo no conocía18
o que borró una esponja calada de minutos,19
como el de ese párvulo que esta noche se siente solo e íntimo20
y que suele llorar ante el retrato21
de un gambusino rubio que se quemó en rosales de sangre al mediodía.22

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