Dame segunda vez, Euterpe amiga,1
bien templada la lira y nuevo aliento,2
que alcance a referir nuevas hazañas:3
ya de Orán y de Ceuta las campañas4
ofrecen otra vez alto argumento5
que a renovar aplausos nos obliga.6
El África enemiga7
ya produce otras palmas y laureles8
para adornar del español la frente.9
Tú, divina Piéride, consiente10
que del furor sagrado con que sueles11
grandes héroes cantar, y sus renombres,12
a pesar del olvido, entre los hombres,13
inmortales hacer, pida hoy no poco:14
es justa la razón por que te invoco.15

Como la generosa águila altiva,16
sobre las vagas aves hecha reina,17
y que sirve al Tonante al pronto rayo,18
si de su arrojo en el primer ensayo19
culebra arrebató que escamas peina,20
y erguida la cerviz su furia aviva,21
en vano ya cautiva,22
de la garra feroz, silba y forceja,23
que el ave, uñas y pico, ensangrentada,24
no suelta más la presa, y remontada25
por la región suprema, el vuelo aleja,26
hasta que el monstruo el fiero orgullo abate;27
y destrozado en desigual combate,28
palpitando algún miembro, en tierra yace;29
lo demás en el aire su hambre pace;30

así la osada juventud de España31
contra el moro obstinado ahora defiende32
las conquistas debidas a su brío.33
En vano el ya perdido señorío34
la descendencia de Ismael pretende35
recobrar con la fuerza o con la maña.36
Verase la campaña37
de Marruecos, de Argel y Terudante38
de púrpura teñida y ríos rojos;39
revolcará los bárbaros despojos40
al mar del Mediodía y al del Atlante,41
destinados juguetes al Euro y Noto,42
cuando después sulcare algún piloto43
las playas hasta donde fue Cartago,44
conocerá en los huesos el estrago.45

Es difícil empresa al enemigo46
la firmeza vencer de tales pechos,47
que honra sólo, valor y fe respiran.48
Ya vulgares ejemplos no se admiran,49
ya del brazo español no salen hechos50
sin conducir la heroicidad consigo.51
Del infeliz Rodrigo52
no dura más el ocio y muelle trato:53
entre noble vergüenza y rabia lucha54
cualquiera de nosotros cuando escucha55
el nombre pronunciar de Mauregato.56
Ya en defender circunvalado muro57
con varia muerte es del ibero duro58
propio, innato el tesón, del cual arguyo59
que sería obstinado, a no ser suyo.60

¡Oh Cantabria feroz! ¡Oh de Sagunto61
inflexible valor! ¡Oh gran Numancia,62
cuyas pérdidas hoy son nuestra gloria!63
Siempre que se renueva la victoria64
de nuestra heroica, indómita constancia,65
falta voz a la fama en tal asunto.66
Cuando el extremo punto67
llegó del hado, el fiero numantino68
al fuego se arrojó en rogos varios,69
dejando admiración a los contrarios;70
trofeos no; que el vencedor latino,71
cuyo valor no en vano se eterniza72
sólo pudo triunfar de la ceniza:73
no haga otra gente de constancia alarde,74
que a esto no llegó nunca, o llegó tarde.75

Nace del fuerte el fuerte, y de la interna76
virtud del padre toma el becerrillo77
que en las dehesas de Jarama pace.78
¿Acaso alguno vio jamás que nace79
del águila feroz triste cuclillo,80
nocturno búho o palomita tierna?81
Como en cadena eterna82
se eslabona el valor, y la prudencia83
se infunde al español de sus pasados.84
De aquellos ascendientes celebrados85
esta nació valiente descendencia,86
de quien ahora tiembla el mauritano;87
después vendrán, y no lo espero en vano,88
emulándose en glorias y en efetos,89
los hijos de los hijos y los nietos.90

Canción, si yo pudiese, bien querría91
hacer de modo que tu voz oyese92
la zona ardiente, la templada y fría;93
y que en tus alas fuese94
la fama de mi patria y sus trofeos95
a los pueblos del Indo, a los sabeos,96
a los de Arauco, Taura, Ida, Erimanto.97
Pero no son tus alas para tanto.98

99

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