El Beso, Federico Barreto

Análisis

¿Qué es un beso? ¿Y tú me lo preguntas? El desarrollo y la esencia temática de este poema recuerdan a una de las piezas más famosas de Bécquer… Ya sabéis, aquello de “Poesía eres tú”… No sabemos si Federico Barreto (1862-1929) conocía la obra del autor sevillano, pero su “El beso” es un pequeño poema de amor, fresco y directo, que apetece recitar de vez en cuando, medio en broma, medio en serio…

Y es que la relación que tienen las personas con la poesía varía mucho… ¿Qué pasaría si hoy en día, en la barra de un bar, le soltamos este poema a una chica? No quiero ni pensarlo. Por suerte, son muchos los que todavía dan a la poesía su verdadero valor, el del mejor vehículo de transmisión de emociones conocido por el ser humano. Porque una palabra puede valer más que mil imágenes. Sí, habéis leído bien…

Si un verso es adecuado y se lee (o recita) en el momento justo, puede ser capaz de despertar mil imágenes, sentimientos y emociones. “El beso” de Barreto puede ser un poema tonto, o la mejor definición de beso posible, ese acto tan humano, tan ridículo, tan estremecedor.

Porque lo que nos gusta de este poema es la combinación de humor y lírica. En la escena, aparecen dos personajes, una morena seductora y un ingenioso poeta. Es el juego de la seducción el que da vida a este poema.

El poeta se enfrenta, así, a una pregunta difícil. “¿Qué es un beso?” es casi tan difícil como “¿qué es poesía?”. Bueno, quizás no tanto. El poeta se pone serio y compara este acto con un eco suave, con un dulce rumor. Se pone poético. Sabe que de su respuesta dependerá el éxito de su empresa, que no es otro que seducir a la morena.

Y cuando está a punto de cerrar el poema con un verso rimbombante, decide ir la calle del medio. “Mira, morena, te vas a enterar de lo que es un beso, ven acá”. Este giro final del poema, con gran sentido del humor, es el que dota de originalidad a la pieza. Cualquier otro final hubiese impedido que este poema fuese recordado un siglo después.

Federico Barreto es conocido como el “cantor del cautiverio”, pues fue uno de los líderes intelectuales que clamó por la ocupación chilena de territorios peruanos que siguió a la Guerra del Pacífico. Buena parte de la producción poética de Barreto se encuadra en la poesía de reivindicación nacional y de amor a su tierra, especialmente a su ciudad natal Tacna. Pero otra vertiente de su poesía es la que vemos reflejada en “El beso”: sensualidad, amor, pasión y un toque de humor.

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Ejemplos de figuras literarias en El Beso

Figuras literarias	Ejemplos	Descripción
Metáfora	"Un beso es el eco suave de un canto"	Expresa que el beso es una expresión de amor y sentimientos profundos.
Metáfora	"Un beso es el dulce idioma / con que hablan dos corazones"	Presenta el beso como un lenguaje entre dos corazones, mostrando que el beso es una forma de comunicación entre las personas que se aman.
Antítesis	"Un beso es...no seas loca... / ¡Junta tu boca a mi boca"	Contrasta la pregunta de qué es un beso con la acción de besar, planteando que la experiencia de un beso es más importante que su explicación.
Paralelismo	"Un beso es el eco suave de un canto, / que más que canto es un himno sacrosanto / que imitar no puede el ave."	Marca la importancia del beso como algo sagrado y especial, y que no puede ser replicado o imitado por otras formas.
Metonimia	"me pides morena mía / que te diga... ¿Qué es un beso?"	Refiere a la mujer como "morena mía", utilizando un atributo físico (el color de su cabello) para representarla en su totalidad.

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