Canción de las voces serenas, Jaime Torres Bodet

Análisis

Esta breve poesía de Jaime Torres nos aporta mucha información acerca de la mirada del poeta sobre la sociedad que lo rodea, sobre lo que siente, acerca del propio ser humano, plasmándolo de una manera que parece sencilla pero que encierra un tono melancólico, triste casi de resignación.

En la primera estrofa del poema nos habla de la vida, de cómo pasa rápidamente como las nubes en el cielo, como los pétalos que caen cuando contamos el “me quieres, no me quieres”. Un camino vital que cae, en muchas ocasiones, en lo superfluo.

En la segunda estrofa se nos remite a las distracciones que pueden ser diferentes y, al mismo tiempo, tan esenciales, como la religión, ver la noche y sus estrellas brillando en la oscuridad y en el pensar en alguien al que deseamos, al que se ama. El amor, para el poeta parece ser una distracción muy importante, quizá la mayor.

En la tercera estrofa se introduce en la propia condición del ser humano. Este parece volver a vivir lo mismo una y otra vez. Ese caer dos veces en la misma piedra es una constante. El amor, envuelto en una música imperceptible, hace que no podamos evitar caer en sus brazos las veces que haga falta.

En la última estrofa la vida se ve como la marea que, poco a poco, como los latidos del corazón, va llegando a la orilla y suena. Pero a diferencia del mar, cada latido de nuestro corazón es un latido menos en nuestra vida, es un camino hacia el fin, hacia nuestra propia muerte. Y de la misma manera que nosotros finalmente moriremos, el amor tendrá el mismo.

Es sorprendente el pensar que en estas cuatro estrofas haya tanta información sobre los sentimientos. La temática del paso de la vida como algo efímero, en el que el mar es una metáfora de propio camino vital, está presente en muchos poetas y poemarios a lo largo de la historia de la literatura. La diferencia está en cómo lo enfoca cada autor.

Lo fundamental de este poema es que nos aporta un nuevo elemento, que es el tono en el que desarrolla esa temática. A diferencia de otros autores que suelen ser más hirientes o menos amables. Este habla del paso de la vida de una manera tranquila, sosegada y siempre desde un punto de vista personal, nunca enfocado a una tercera persona que le haya hecho daño, engañado, etc. Parece más una reflexión personal versificada que un poema en sí mismo.

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